miércoles, 31 de mayo de 2017

Abel Caballero huyendo a uña de caballo, mientras el urbanismo en Vigo sigue paralizado.

   En una entrevista publicada hace un año (el 29 de mayo de 2016, con motivo de cumplir nueve años como alcalde de Vigo) Abel Caballero declaraba: “En tiempo récord habrá un nuevo Plan General en Vigo”. VER.
  Caballero echaba a la Xunta la culpa de la anulación del PXOM (Plan Xeral de Ordenación Municipal): "El Plan General se cae por un informe de la Xunta, como institución, no hablo de Feijóo". Pero ocultaba que esa Xunta a la que se refiere fue la del PSOE de Touriño que gobernaba Galicia el año 2008. Y que quien realmente hizo mal (o no hizo) ese informe fue el Concello de Vigo que él ya dirigía.
   El alcalde añadía: "Estamos a uña de caballo haciendo la batalla jurídica y con todo el proceso de elaboración en marcha. En tiempo récord habrá un nuevo Plan General en Vigo."
   La expresión literaria "a uña de caballo" se aplica a alguien que huye a toda velocidad de algún sitio, y por lo tanto no a quien hace algo con cuidado, orden y prudencia.
Una de las innumerables "promesas para Vigo con maqueta"
realizadas estos años por Abel Caballero (derecha).
   Caballero lleva todo este tiempo montado en su caballo a todo galope. Las prisas no son buenas para gobernar una ciudad. El alcalde va a toda prisa de un sitio a otro, de un acto de inauguración o de entrega de subvenciones a otro, haciéndose fotos y prometiendo bancos y farolas a los vecinos... Parece que hace, pero no hace nada. Porque después de todo este tiempo la realidad es que el problema del Pxom sigue estancado, que los ingresos por urbanismo son la mitad de los presupuestados, que la ciudad está parada, y que solo han subido, eso sí, las multas por infracciones urbanísticas.
   Estos días PP ha denunciado que tras dos años el Gobierno con mayoría absoluta de Abel Caballero, el grupo municipal socialista no ha presentado ni un solo papel para resolver el problema de la anulación del Pxom. (VER).

La visita a las ruinas urbanísticas, como la de la Panificadora,
se podrían incluir en el programa de visitas turísticas a Vigo.